Entrenamiento Principal. Argentum.
≈ βlεαcн-Яσl ∞ :: Basurero :: Papelera
Página 1 de 1.
Entrenamiento Principal. Argentum.
por Invitado Sáb Jul 18, 2009 7:00 am
Primer Entrenamiento. Presentaciones
Un año había transcurrido desde su ingreso a la academia. Se encontraba feliz de su situación actual, recomendado al segundo escuadrón, aunque sin posibilidad de entrenamiento en él. La solución fue simple, se adentró en el octavo escuadrón temporalmente.
Se encontraba sentado en una de las salas de entrenamiento. Aquel día sería memorable, planeaba aumentar su velocidad con el shumpo, técnica básica para un buen asesinato limpio y veloz, la especialidad de Sei.
El entrenamiento inició perfecto. Su velocidad era constante, y cumplía los tiempos estándares justificados en cada uno de sus movimientos, e incluso en alguno de ellos los superaba. Su velocidad era superior a la de un Shinigami Raso convencional.
En aquel momento, después de varias horas entrenando y en un estado de máxima agitación, sintió como una voz le llamaba. El Reiatsu de Argentum fluyó algunos segundos por el cuerpo de Sei, dándole una sensación de armonía, paz y poder increíble.
-¿Pero qué ha sido eso...?- Susurró mientras dirigía violentamente sus iris hacia su zanpakutoh, la cual se encontraba detrás de su espalda.
-¿Has sido tú?- Añadió mientras caía al suelo. Aquel momento había dejado ciertamente anonadado a Sei. Este solo hacía un año que se había graduado en la academia, y su zanpakutoh ya gustaba de conocerlo, así como Sei también gustaba de conocer a su zanpakutoh.
Desenvainó la zanpakutoh para quedar observándola. Hoy era el día, hoy conectaría con su zanpakutoh, y averiguiaría su nombre y forma.
Un año había transcurrido desde su ingreso a la academia. Se encontraba feliz de su situación actual, recomendado al segundo escuadrón, aunque sin posibilidad de entrenamiento en él. La solución fue simple, se adentró en el octavo escuadrón temporalmente.
Se encontraba sentado en una de las salas de entrenamiento. Aquel día sería memorable, planeaba aumentar su velocidad con el shumpo, técnica básica para un buen asesinato limpio y veloz, la especialidad de Sei.
El entrenamiento inició perfecto. Su velocidad era constante, y cumplía los tiempos estándares justificados en cada uno de sus movimientos, e incluso en alguno de ellos los superaba. Su velocidad era superior a la de un Shinigami Raso convencional.
En aquel momento, después de varias horas entrenando y en un estado de máxima agitación, sintió como una voz le llamaba. El Reiatsu de Argentum fluyó algunos segundos por el cuerpo de Sei, dándole una sensación de armonía, paz y poder increíble.
-¿Pero qué ha sido eso...?- Susurró mientras dirigía violentamente sus iris hacia su zanpakutoh, la cual se encontraba detrás de su espalda.
-¿Has sido tú?- Añadió mientras caía al suelo. Aquel momento había dejado ciertamente anonadado a Sei. Este solo hacía un año que se había graduado en la academia, y su zanpakutoh ya gustaba de conocerlo, así como Sei también gustaba de conocer a su zanpakutoh.
Desenvainó la zanpakutoh para quedar observándola. Hoy era el día, hoy conectaría con su zanpakutoh, y averiguiaría su nombre y forma.
Última edición por Sei Satsujin el Lun Jul 20, 2009 3:53 pm, editado 1 vez
Invitado- Invitado
Re: Entrenamiento Principal. Argentum.
por Invitado Sáb Jul 18, 2009 7:07 am
Segundo Entrenamiento. Su voz
Los anteriores acontecimientos habían dejado ciertamente satisfecho a Sei, quien había podido escuchar un susurro por parte de su zanpakutoh de nombre todavía desconocido. Él esperaba que este hecho fuese solucionado en poco tiempo. Necesitaba conocer a su espíritu interior.
Tomó asiento en una de las salas de su escuadrón, más concrétamente la de meditación y armonía, para posteriormente tomar posición de loto y hacer descender sus pestallas, cerrando completamente sus ojos. Aquello le proporcionaba paz y concentración. No debía guiarse solamente por su sentido de la vista ni oido. A veces, el alma era la mejor guía.
Dirigió su mano derecha hacia la vaina horizontal, para posteriormente agarrar el mango de su Wakizashi y empuñarla. Aquel rito fue totalmente improvisado. Su alma guiaba los movimientos. Posteriormente, colocó su zanpakutoh horizontalmente en el suelo.
Una vez en el suelo, extendió y descendió su brazo izquierdo, quedando encima, a apenas cinco centímetros de su Wakizashi. Aquella sensación era sublime. Podía escuchar y percibir la voz de su zanpakutoh. Un escalofrío recorrio todo su cuerpo, para posteriormente adentrarse en lo más hondo de su ser.
-"Sei...Sei..."- Repetía la distorsionada voz.-"Ven... conmigo..."- Añadió.
El Shinigami tuvo el impulso de tocar la hoja de su arma. Y así fue, su mano se dirigió inconscientemente hacia su zanpakutoh, impactando contra su hoja y filo. Pero era extraño, no sintió dolor, ni siquiera un corte. En cambio, su mente se trasladó a otro plano.
Ya no se encontraba en la sala de meditación...
Los anteriores acontecimientos habían dejado ciertamente satisfecho a Sei, quien había podido escuchar un susurro por parte de su zanpakutoh de nombre todavía desconocido. Él esperaba que este hecho fuese solucionado en poco tiempo. Necesitaba conocer a su espíritu interior.
Tomó asiento en una de las salas de su escuadrón, más concrétamente la de meditación y armonía, para posteriormente tomar posición de loto y hacer descender sus pestallas, cerrando completamente sus ojos. Aquello le proporcionaba paz y concentración. No debía guiarse solamente por su sentido de la vista ni oido. A veces, el alma era la mejor guía.
Dirigió su mano derecha hacia la vaina horizontal, para posteriormente agarrar el mango de su Wakizashi y empuñarla. Aquel rito fue totalmente improvisado. Su alma guiaba los movimientos. Posteriormente, colocó su zanpakutoh horizontalmente en el suelo.
Una vez en el suelo, extendió y descendió su brazo izquierdo, quedando encima, a apenas cinco centímetros de su Wakizashi. Aquella sensación era sublime. Podía escuchar y percibir la voz de su zanpakutoh. Un escalofrío recorrio todo su cuerpo, para posteriormente adentrarse en lo más hondo de su ser.
-"Sei...Sei..."- Repetía la distorsionada voz.-"Ven... conmigo..."- Añadió.
El Shinigami tuvo el impulso de tocar la hoja de su arma. Y así fue, su mano se dirigió inconscientemente hacia su zanpakutoh, impactando contra su hoja y filo. Pero era extraño, no sintió dolor, ni siquiera un corte. En cambio, su mente se trasladó a otro plano.
Ya no se encontraba en la sala de meditación...
Última edición por Sei Satsujin el Lun Jul 20, 2009 3:53 pm, editado 1 vez
Invitado- Invitado
Re: Entrenamiento Principal. Argentum.
por Invitado Sáb Jul 18, 2009 7:37 am
Tercer Entrenamiento. Mundo Interior
En poco más de un segundo, Sei había sido transportado de un plano a otro, abandonando la sala de meditación y adentrándose en un amplio y árido desierto. Aquel lugar no poseía vegetación alguna, así como tampoco ningún tipo de fauna o vida.
El único elemento que podía distinguirse a parte de la plata que inundaba todo el suelo, a modo de arena, era una brillante pirámide. Su color era plateado intenso. El Sol la hacía brillar con intensidad por una de sus dos caras. Por la otra, la luna conseguía que la pirámide iluminara tenuemente toda la zona.
No podía creer lo que veía. Estaba completamente seguro que se encontraba en aquel lugar que muchos denominaban el mundo interno de una zanpakutoh. Sei caminaba lentamente por el mar de plata, mientras analizaba la pirámide cuidadosamente.
En aquel momento, y justo antes de pisar la pirámide, una tormenta de espadas plateadas cayó del cielo, formando una muralla alrededor del bonito elemento de apariencia milenaria.
Sei, sorprendido, retrocedió varios pasos mientras intentaba envainar su zanpakutoh. Aunque era algo extraño, esta no se encontraba en su lugar. No se encontraba en su vaina.
-¡¿Pero qué está pasando?!- Exclamó nervioso, mientras emprendía carrera contra las espadas, intentándolas destruir con golpes físicos, veloces, precisos pero en el fondo ineficaces contra la plata, uno de los metales de transición más duros.
-No entiendo nada...- Susurró mientras caía al suelo, algo cansado.
En poco más de un segundo, Sei había sido transportado de un plano a otro, abandonando la sala de meditación y adentrándose en un amplio y árido desierto. Aquel lugar no poseía vegetación alguna, así como tampoco ningún tipo de fauna o vida.
El único elemento que podía distinguirse a parte de la plata que inundaba todo el suelo, a modo de arena, era una brillante pirámide. Su color era plateado intenso. El Sol la hacía brillar con intensidad por una de sus dos caras. Por la otra, la luna conseguía que la pirámide iluminara tenuemente toda la zona.
No podía creer lo que veía. Estaba completamente seguro que se encontraba en aquel lugar que muchos denominaban el mundo interno de una zanpakutoh. Sei caminaba lentamente por el mar de plata, mientras analizaba la pirámide cuidadosamente.
En aquel momento, y justo antes de pisar la pirámide, una tormenta de espadas plateadas cayó del cielo, formando una muralla alrededor del bonito elemento de apariencia milenaria.
Sei, sorprendido, retrocedió varios pasos mientras intentaba envainar su zanpakutoh. Aunque era algo extraño, esta no se encontraba en su lugar. No se encontraba en su vaina.
-¡¿Pero qué está pasando?!- Exclamó nervioso, mientras emprendía carrera contra las espadas, intentándolas destruir con golpes físicos, veloces, precisos pero en el fondo ineficaces contra la plata, uno de los metales de transición más duros.
-No entiendo nada...- Susurró mientras caía al suelo, algo cansado.
Última edición por Sei Satsujin el Lun Jul 20, 2009 3:54 pm, editado 1 vez
Invitado- Invitado
Re: Entrenamiento Principal. Argentum.
por Invitado Sáb Jul 18, 2009 10:25 am
Cuarto Entrenamiento. Argentum se da a conocer
Mientras Sei se encontraba en el suelo, jadeando por el cansancio que había provocado intentar superar la barrera de espadas, una figura apareció instantáneamente en la más alto de la piramide. Esta se encontraba oculta bajo una capa negra, no podía divisarse ningún punto de su humanidad.
-¿Quién eres?- Exclamó algo anonadado. No pensaba nadie habitara aquella tierra desértica. Incluso había supuesto que se encontraba en estado de shock o desmayado, y que absolutamente todo era un sueño... Una pesadilla.
-No soy mas que alguien a quien conocer...- Comentó la encapuchada. Su voz era increíblemente femenina, agradable para el oído, tranquilizadora.
-No puede ser... Tú eres...- Exclamó mientras dirigía su mirada hacia la encapuchada. Parecía que poco a poco su figura se acercaba a las espadas. Descendía elegante por la pirámide.
-Tú eres mi compañera... Mi guía... El espíritu de mi zanpakutoh...- Añadió.- Tú eres...
El espíritu ya se encontraba al lado de las espadas. Acercó su cabeza mientras quitaba su capucha. Su bello rostro ya era totalmente visible. Sus amarillos iris chocaron con los de Sei.
-Yo soy Argentum...- Finalizó.
Mientras Sei se encontraba en el suelo, jadeando por el cansancio que había provocado intentar superar la barrera de espadas, una figura apareció instantáneamente en la más alto de la piramide. Esta se encontraba oculta bajo una capa negra, no podía divisarse ningún punto de su humanidad.
-¿Quién eres?- Exclamó algo anonadado. No pensaba nadie habitara aquella tierra desértica. Incluso había supuesto que se encontraba en estado de shock o desmayado, y que absolutamente todo era un sueño... Una pesadilla.
-No soy mas que alguien a quien conocer...- Comentó la encapuchada. Su voz era increíblemente femenina, agradable para el oído, tranquilizadora.
-No puede ser... Tú eres...- Exclamó mientras dirigía su mirada hacia la encapuchada. Parecía que poco a poco su figura se acercaba a las espadas. Descendía elegante por la pirámide.
-Tú eres mi compañera... Mi guía... El espíritu de mi zanpakutoh...- Añadió.- Tú eres...
El espíritu ya se encontraba al lado de las espadas. Acercó su cabeza mientras quitaba su capucha. Su bello rostro ya era totalmente visible. Sus amarillos iris chocaron con los de Sei.
-Yo soy Argentum...- Finalizó.
Última edición por Sei Satsujin el Lun Jul 20, 2009 3:54 pm, editado 1 vez
Invitado- Invitado
Re: Entrenamiento Principal. Argentum.
por Invitado Sáb Jul 18, 2009 10:34 am
Quinto Entrenamiento. Primera charla
Justo cuando escuchó el nombre de Argentum, todas las espadas que rodeaban la pirámide se desvanecieron por completo, dejando paso libre a Sei, quien sin pensarlo dos veces saltó hacia sus escalones, quedando justo a la derecha de su compañera.
-Es un gusto por fin conocerte, Argentum- Acotó sonriente. Este era un acto poco común en Sei, el sonreir. Argentum no pudo evitar reír ante aquello.
-¿Tú sonriendo?- Preguntó burlona.- Creo que esta dimensión va a desaparecer- Añadió nuevamente cómica, mientras sonreía.
-¿Como sabes eso de mí?- Preguntó algo asombrado, mientras tornaba serio nuevamente. Argentum era realmente bella. Una mujer extremadamente sexy y preciosa.
-Cariño, yo lo sé todo sobre tí. Es mas... Yo soy tú, en cierto modo- Respondió mientras cerraba sus ojos y sonreía. - Tomemos asiento- Acotó mientras se sentaba en uno de los escalones. Sei imitó sus movimientos.
-Me conoces... Ahora podré prestarte mi poder en la batalla... Y espero que en un futuro pueda guiarte hacia la victoria como uno solo... En mi estado de liberación...- Comentó.
-Estoy seguro de ello- Respondió el Shinigami.
Justo cuando pronunció la última palabra, todo el mundo interior comenzó a desvanecerse. Incluso Argentum tornó simple plata, la cual se depositó en la vaina de su zanpakutoh, en su espalda. Allí tomó descanso.
Tras varios segundos de oscuridad total, sumergido en sus pensamientos, despertó nuevamente en el salón de meditación. Una marcada sonrisa imperaba en su rostro ahora.
Se levantó del suelo, para posteriormente dirigirse hacia la salida de aquel lugar.
Justo cuando escuchó el nombre de Argentum, todas las espadas que rodeaban la pirámide se desvanecieron por completo, dejando paso libre a Sei, quien sin pensarlo dos veces saltó hacia sus escalones, quedando justo a la derecha de su compañera.
-Es un gusto por fin conocerte, Argentum- Acotó sonriente. Este era un acto poco común en Sei, el sonreir. Argentum no pudo evitar reír ante aquello.
-¿Tú sonriendo?- Preguntó burlona.- Creo que esta dimensión va a desaparecer- Añadió nuevamente cómica, mientras sonreía.
-¿Como sabes eso de mí?- Preguntó algo asombrado, mientras tornaba serio nuevamente. Argentum era realmente bella. Una mujer extremadamente sexy y preciosa.
-Cariño, yo lo sé todo sobre tí. Es mas... Yo soy tú, en cierto modo- Respondió mientras cerraba sus ojos y sonreía. - Tomemos asiento- Acotó mientras se sentaba en uno de los escalones. Sei imitó sus movimientos.
-Me conoces... Ahora podré prestarte mi poder en la batalla... Y espero que en un futuro pueda guiarte hacia la victoria como uno solo... En mi estado de liberación...- Comentó.
-Estoy seguro de ello- Respondió el Shinigami.
Justo cuando pronunció la última palabra, todo el mundo interior comenzó a desvanecerse. Incluso Argentum tornó simple plata, la cual se depositó en la vaina de su zanpakutoh, en su espalda. Allí tomó descanso.
Tras varios segundos de oscuridad total, sumergido en sus pensamientos, despertó nuevamente en el salón de meditación. Una marcada sonrisa imperaba en su rostro ahora.
Se levantó del suelo, para posteriormente dirigirse hacia la salida de aquel lugar.
Última edición por Sei Satsujin el Lun Jul 20, 2009 3:54 pm, editado 1 vez
Invitado- Invitado
Re: Entrenamiento Principal. Argentum.
por Invitado Sáb Jul 18, 2009 10:36 am
Sexto Entrenamiento. Segunda Charla. Días después
Sei caminaba lentamente, atravesando el complejo de entrenamientos, en su totalidad. Se dirigía directamente hacia una pequeña y acogedora sala, donde iniciaría su entrenamiento diario.
Argentum lucía empuñada en su mano.
La colocó encima de una mesa, mientras se sentaba en el suelo, preparándose para iniciar una profunda y larga charla con su zanpakutoh. Esta parecía brillar con especial intensidad.
Tras varios minutos de absoluto silencio, concentración, meditación, y un estado de simbiosis sumamente profundo con Argentum, consiguió tomar contacto con dicho elemento.
Un intenso fulgor multicolor surgió de su zanpakutoh, iluminando completamente toda la sala, mientras
levitaba en el aire, moviéndose lentamente de un lado a otros. Posteriormente, este se formó en la figura de un pálido personaje, de ojos dorados, mirada perdida.
-Largo tiempo sin vernos, Argentum- Comentó Sei, mientras sonreía a la manifestación metafísica
de su zanpakutoh. Aquella conversación sería interesante.
-Demasiado... Últimamente ya no hablamos... Desde que me conociste, aproximadamente...- Respondió el espíritu, para posteriormente levitar alrededor de su portador.
Su voz era algo distorsionada y femenina. Se trataba de un espíritu de características féminas.
-Ya veo... Como sabrás he conseguido hacerme un lugar en la octava división, aunque ya sabes lo que opino sobre las funciones de este escuadrón... La división más acertada para mis características es la segunda.
-Características... Mejor deberías perfeccionar nuestro poder antes de aventurarte en cualquier cambio de escuadrón. Debes madurar. Tanto tú, como tus habilidades y conexión conmigo mismo.
Las palabras de Argentum eran sabias. Se trataba de un espíritu cualificado, así como también poseía cierto grado de experiencia en combate, en épocas pasadas.
-Tienes razón... Siempre la tienes... Estoy intentando perfeccionar mis habilidades de combate individuales, aunque de ahora en adelante procuraré entrenar contigo una vez al día, siempre que pueda y disponga del tiempo necesario.
-Ya sabes que te apreció demasiado, Argentum- Acotó mientras se acercaba a la luz, sonriéndole una vez más.
-Deberías hacerlo... Soy la fuente de tu poder, cariño mío- Comentó, replicando la anterior frase de Satsujin, a modo de burla, mientras reía.
Sesiones de entrenamiento como aquellas reforzaban la confianza y habilidad de Sei para poder convocar a Argentum con total facilidad. También incrementaban en demasía la auto-estima que Sei sentía por él mismo. Conectar con su zanpakutoh le ofrecía paz.
Su experiencia aumentaba a medida que los días pasaban. Esperaba poder convertirse en un rango mayor dentro de poco.
Sei caminaba lentamente, atravesando el complejo de entrenamientos, en su totalidad. Se dirigía directamente hacia una pequeña y acogedora sala, donde iniciaría su entrenamiento diario.
Argentum lucía empuñada en su mano.
La colocó encima de una mesa, mientras se sentaba en el suelo, preparándose para iniciar una profunda y larga charla con su zanpakutoh. Esta parecía brillar con especial intensidad.
Tras varios minutos de absoluto silencio, concentración, meditación, y un estado de simbiosis sumamente profundo con Argentum, consiguió tomar contacto con dicho elemento.
Un intenso fulgor multicolor surgió de su zanpakutoh, iluminando completamente toda la sala, mientras
levitaba en el aire, moviéndose lentamente de un lado a otros. Posteriormente, este se formó en la figura de un pálido personaje, de ojos dorados, mirada perdida.
-Largo tiempo sin vernos, Argentum- Comentó Sei, mientras sonreía a la manifestación metafísica
de su zanpakutoh. Aquella conversación sería interesante.
-Demasiado... Últimamente ya no hablamos... Desde que me conociste, aproximadamente...- Respondió el espíritu, para posteriormente levitar alrededor de su portador.
Su voz era algo distorsionada y femenina. Se trataba de un espíritu de características féminas.
-Ya veo... Como sabrás he conseguido hacerme un lugar en la octava división, aunque ya sabes lo que opino sobre las funciones de este escuadrón... La división más acertada para mis características es la segunda.
-Características... Mejor deberías perfeccionar nuestro poder antes de aventurarte en cualquier cambio de escuadrón. Debes madurar. Tanto tú, como tus habilidades y conexión conmigo mismo.
Las palabras de Argentum eran sabias. Se trataba de un espíritu cualificado, así como también poseía cierto grado de experiencia en combate, en épocas pasadas.
-Tienes razón... Siempre la tienes... Estoy intentando perfeccionar mis habilidades de combate individuales, aunque de ahora en adelante procuraré entrenar contigo una vez al día, siempre que pueda y disponga del tiempo necesario.
-Ya sabes que te apreció demasiado, Argentum- Acotó mientras se acercaba a la luz, sonriéndole una vez más.
-Deberías hacerlo... Soy la fuente de tu poder, cariño mío- Comentó, replicando la anterior frase de Satsujin, a modo de burla, mientras reía.
Sesiones de entrenamiento como aquellas reforzaban la confianza y habilidad de Sei para poder convocar a Argentum con total facilidad. También incrementaban en demasía la auto-estima que Sei sentía por él mismo. Conectar con su zanpakutoh le ofrecía paz.
Su experiencia aumentaba a medida que los días pasaban. Esperaba poder convertirse en un rango mayor dentro de poco.
Última edición por Sei Satsujin el Lun Jul 20, 2009 3:54 pm, editado 1 vez
Invitado- Invitado
Re: Entrenamiento Principal. Argentum.
por Invitado Sáb Jul 18, 2009 10:42 am
Séptimo Entrenamiento. Tercera charla. Liberación
Un pequeño bosque repleto de árboles fueron la siguiente zona de entrenamiento de Sei, quien esta vez buscaba tomar el poder de Argentum. Debía adquirir una relación más a fondo con ella si
quería llegar a ascender en algún momento.
Caminaba lenta y pausadamente, mientras contemplaba la hoja plateada de Argentum, atónito por su belleza.
Los rayos del sol iluminaban de una manera única dicho elemento, y su empuñadura parecía palpitar cuando estos entraban en contacto con ella. Era una escena realmente especial y bella a la vista terrenal.
Una vez encontró el lugar indicado, un pequeño claro rodeado de unos cuantos árboles perfectamente estacionados, formaban un circulo perfecto, procedió a sentarse, en medio de la hierba.
Posteriormente se posicionó en loto, esperando tomar una mejor postura y más adecuada para el proceso de conexión.
Pasados los minutos, y ya totalmente concentrado en su tarea, la manifestación lumínica de Argentum se dejó ya divisar, levitando en el aire, como acostumbraba a hacer.
Obviamente no era la fase final de dicho elemento. Era un punto intermedio entre su conexión. Aunque podía
vislumbrar su figura, y conocía ya su nombre, no era capaz de divisar su rostro. Aquello era algo que preocupaba al Shinigami.
-Buenos días- Comentó la manifestación, mientras efectuaba una pequeña risa. -Últimamente contactas mucho conmigo- Concluyó.
Sei parecía serio. Debía conseguir que Argentum le prestara su poder en futuros combates. Incrementar su Reiatsu, así como también lograr alcanzar la primera liberación, el Shikai.
-Lo sé. Y por cierto, buenos días a ti también, mi educada aliada- Respondió cordialmente.
-Necesito de tu poder para poder, válgase la redundancia, incrementar mis fuerzas en combate, y así conseguir el preciado y deseado ascenso. Obviamente, también sé que con el tiempo te mostrarás ante mí en tu verdadera forma... Eso espero...
Su trato ya no era tan frío y vació como antes. La confianza imperaba en sus conversaciones en aquellos últimos encuentros eventuales.
-No tengo ningún problema en darte mi fuerza. En prestártela. Pero deberás ganar mi confianza- Acotó la brillante luz etérea convertida ya en una figura similar a la humana, mientras reía levemente, pícaramente.
-Entiendo... En nuestro próximo entrenamiento intentaremos alcanzar y acercarnos a la primera liberación. Espero pongas de tu parte. Yo pondré todo mi poder- Finalizó Satsujin, mientras se retiraba del lugar.
-Adiós, amigo mío- Concluyó mientras envainaba la zanpakutoh, y la figura espiritual se evaporaba por completo, dejando la zona iluminada únicamente por el Sol que reinaba en aquel día.
Sus pasos le guiaron hacia la salida del bosque.
Un pequeño bosque repleto de árboles fueron la siguiente zona de entrenamiento de Sei, quien esta vez buscaba tomar el poder de Argentum. Debía adquirir una relación más a fondo con ella si
quería llegar a ascender en algún momento.
Caminaba lenta y pausadamente, mientras contemplaba la hoja plateada de Argentum, atónito por su belleza.
Los rayos del sol iluminaban de una manera única dicho elemento, y su empuñadura parecía palpitar cuando estos entraban en contacto con ella. Era una escena realmente especial y bella a la vista terrenal.
Una vez encontró el lugar indicado, un pequeño claro rodeado de unos cuantos árboles perfectamente estacionados, formaban un circulo perfecto, procedió a sentarse, en medio de la hierba.
Posteriormente se posicionó en loto, esperando tomar una mejor postura y más adecuada para el proceso de conexión.
Pasados los minutos, y ya totalmente concentrado en su tarea, la manifestación lumínica de Argentum se dejó ya divisar, levitando en el aire, como acostumbraba a hacer.
Obviamente no era la fase final de dicho elemento. Era un punto intermedio entre su conexión. Aunque podía
vislumbrar su figura, y conocía ya su nombre, no era capaz de divisar su rostro. Aquello era algo que preocupaba al Shinigami.
-Buenos días- Comentó la manifestación, mientras efectuaba una pequeña risa. -Últimamente contactas mucho conmigo- Concluyó.
Sei parecía serio. Debía conseguir que Argentum le prestara su poder en futuros combates. Incrementar su Reiatsu, así como también lograr alcanzar la primera liberación, el Shikai.
-Lo sé. Y por cierto, buenos días a ti también, mi educada aliada- Respondió cordialmente.
-Necesito de tu poder para poder, válgase la redundancia, incrementar mis fuerzas en combate, y así conseguir el preciado y deseado ascenso. Obviamente, también sé que con el tiempo te mostrarás ante mí en tu verdadera forma... Eso espero...
Su trato ya no era tan frío y vació como antes. La confianza imperaba en sus conversaciones en aquellos últimos encuentros eventuales.
-No tengo ningún problema en darte mi fuerza. En prestártela. Pero deberás ganar mi confianza- Acotó la brillante luz etérea convertida ya en una figura similar a la humana, mientras reía levemente, pícaramente.
-Entiendo... En nuestro próximo entrenamiento intentaremos alcanzar y acercarnos a la primera liberación. Espero pongas de tu parte. Yo pondré todo mi poder- Finalizó Satsujin, mientras se retiraba del lugar.
-Adiós, amigo mío- Concluyó mientras envainaba la zanpakutoh, y la figura espiritual se evaporaba por completo, dejando la zona iluminada únicamente por el Sol que reinaba en aquel día.
Sus pasos le guiaron hacia la salida del bosque.
Invitado- Invitado
Temas similares» Entrenamiento con Yoh-San
» Entrenamiento 1/5
» Entrenamiento con yoh
» Entrenamiento
» Entrenamiento 02
» Entrenamiento 1/5
» Entrenamiento con yoh
» Entrenamiento
» Entrenamiento 02
≈ βlεαcн-Яσl ∞ :: Basurero :: Papelera
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.|
|
|